San Francisco Tlalnepantla, Xochimilco, es el espacio geográfico donde César Rangel elabora su obra visual: un conjunto de piezas minimalistas cargadas de significados profundos. En este dossier, el artista nos habla sobre los procesos creativos que lo mueven a explorar la natación como detonante de experiencias estéticas.

La relación entre mi obra y SAN FRANCISCO TLALNEPANTLA es determinante. El pueblo donde vivo es como una cápsula. Ahí está mi casa y en ella mi taller. A kilómetro y medio está la alberca a la que asisto a diario caminando, porque el nado es un factor crucial en mi trabajo. Podría decir que las características tangibles e intangibles del lugar y lo que implica vivir ahí, aparecen sin velo en mi obra.

EL AGUA, EL CUERPO Y EL NADO han sido nociones fundamentales en los últimos cinco años. No obstante, entre 2014 y 2015 han perdido centralidad, mas no permanencia. Creo que podría relacionar cualquier cosa, cualquier tema a estos tres elementos.


Trabajo en proyectos que tienen principio y fin, pero que conservan el potencial de dialogar continuamente. Esto último incluso lo propicio. Tengo una METODOLOGÍA RECURRENTE, suelo trabajar por series cortas (15 piezas a lo sumo) y multidisciplinarias sobre determinado tema. Todas propician siempre una inercia que me lleva continuamente a sitios desconocidos pero con directrices claras sobre lo que hay que hacer. Ahora trabajo sobre un relato mesopotámico contenido en la epopeya de Gilgamesh, el de Utnapishtim, personaje que pasa a la tradición hebrea como Noé. Su historia está pletórica de imágenes potentísimas, y es esa potencia iconográfica e iconológica la que me interesa explorar.




Las TÉCNICAS para abordar esto van surgiendo desde una tradición personal [pintura, escultura, dibujo, imágenes digitales] y todo aquello que veo, registro y aprendo consciente e inconscientemente. Tengo un guión esbozado, pero el curso se va dando con poca intervención mía.

Ahora mismo, con el proyecto de Utnapishtim, voy a nadar temprano y a las diez de la mañana ya estoy en el taller prácticamente enclaustrado. Salgo poco, sólo cuando es necesario para atender algunas cosas. Estas salidas obligadas resultan a menudo determinantes en el proceso del proyecto. Mientras trabajo, escucho documentales en YouTube. Ayer escuché uno de la serie "Cosmos" de CARL SAGAN y eso también asoma en el resultado.


Me interesan muchas DISCIPLINAS CREATIVAS. Ahora mismo, la astrología y la astronomía, la alquimia y la química. Creo que nada cuanto existe está aislado. Cuando el pensamiento enfoca algo "específico", inevitablemente abarca la totalidad. El pensamiento mítico-religioso antiguo afirma que las formas son un todo y ese todo es cada una de las formas. De tal suerte, el nado, el acto de transitar a vaivenes en una alberca, supone en mi trabajo el elemento catalizador para pensar, nombrar y dotar prácticamente a cualquier cosa de una realidad—cuanto más imposible, mejor.



Todas las imágenes: Cortesía del autor.

Vivientes (1 de 2). Impresión digital sobre papel fabriano. 21 x 34 cm. 2015

Inanna. Archivo digital. Medida y soportes variables. 2015

Ciervo-lluvia. Dibujo sobre papel fabriano. 2015

Inanna. Archivo digital. Medida y soporte variables. 2015